TALLER PARA NAVEGANTES

¿QUÉ ES PARA TI LA ORACIÓN Y LA PLEGARIA? (2ªpt)

Para Kirpal Singh, La oración es la llave maestra que abre el Reino de los Cielos.

La oración es la sal de la vida y no podemos pasarnos sin ella. Está engranada en la naturaleza del hombre el orar por la realización de sus deseos, sean éstos cuales fueren pero lo más corriente es que no sepamos en realidad qué es aquello por lo que debemos orar, cómo orar, y qué hacer para convertir nuestra oración en una gran fuerza dinámica que pueda conmover la misericordia del Cielo. Y la oración es la llave maestra que abre el Reino de los Cielos (…) El secreto del éxito de una oración no se encuentra tanto en las palabras que usamos, ni en el tiempo que dedicamos a la oración, ni en el esfuerzo que ponemos en ello, como en la concentración de la atención que podamos lograr en el asiento del alma, para que esta tenga conciencia de ella. La forma más natural de una oración fructífera es la ansiedad del alma, sin necesidad de palabras, orales o mentales con la lengua del pensamiento. Esta clase de oración genera y libera tal cantidad de energía espiritual que todos los poderes cósmicos son atraídos y se combinan para dar forma a las cosas de la mejor manera posible (…) la oración debe elevarse de las profundidades del alma. No debe ser una vana repetición de palabras vacías y sin ningúnsignificado. Aquello por lo que oramos, debemos realmente desearlo, no solo intelectualmente, sino que desde el fondo de nuestro ser. Debe encantar al alma hasta sus más remotas profundidades, y la música de la oración debe salir vibrando por los nervios, las fibras, los tejidos y por todo el cuerpo, haciéndonos olvidar todo lo que no sea la dulce música del alma (…) La Oración, siendo como es un grito del alma en agonía, es más bella y más natural cuando brota espontáneamente como un fresco manantial brota de las entrañas de la tierra. No necesita de adornos, ni de palabras especiales ni de frases sonoras. Por el contrario, tales adornos dañan la verdadera belleza de la libre expresión, y muy a menudo, el hombre que ora es arrastrado a las redes de una excesiva verbosidad vacía. Esto convierte a la oración en algo artificial. … el producto de un arte deliberado y divorciado del sentimiento. Estas oraciones nos hacen falsos con nosotros mismos y no son de beneficioalguno. A Dios le interesan las emociones genuinas, expresadas en palabras propias, no importa cuán sencillas, pero no las fórmulas pre-establecidas, repeticiones vanas, fraseología ostentosa o exposiciones aprendidas (1)

- KIRPAL SING: La Oración, su naturaleza y su técnica

Mi Señor! : Soy ignorante, no sé que pedirte.
Dame lo que consideres qué es lo mejor para mí.
Dame Fortaleza y Sabiduría para ser
feliz con aquello que consideres apropiado otorgarme
y con el lugar donde me has colocado.
No tengo virtudes, ni devoción. Mis acciones son todas oscuras y pecaminosas.
No poseo méritos y la mente me ha destruido.
Para un pecador como yo ¡Oh Señor! no existe refugio alguno sino a tus
Bienaventurados Pies.
Por favor, tómame bajo Tu amparo. No deseo nada más. Hazme tu esclavo, permite que yo sea tuyo y que Tú seas mío. (Sawa Singh Ji)

   Del Testamento de Milarepa, Tíbet, s.XI

   Ligados a las letras de las fórmulas de oración,

no hallarán en las prácticas exteriores más que motivos de extravío.

Quien no extrae de sí mismo su satisfacción,

no acumula más que para enriquecer a los demás.

Quien no tiene en sí mismo la fuente de su felicidad no halla sino dolor en la felicidad exterior.

El deseo de agradar agita los cinco venenos.

Los deseos temporales separan a los más queridos amigos.

La grandeza de uno es la humillación de los demás.

El silencio sobre uno mismo evitará los conflictos.

Proteger la propia calma y evitar la turbación

proporcionará compañeros al solitario.

Tomad el último lugar y conseguiréis el primero.

Quien camina lentamente llega con rapidez.

La renuncia produce grandes efectos.

Permanecer en la vida secreta conduce por el camino más corto.

La noción de la nada engendra la piedad.

La piedad suprime las diferencias entre uno mismo y los demás.

La unión entre uno mismo y los demás realiza la causa del prójimo.

Quien realice la causa del prójimo me encontrará.

Quien me haya encontrado será buda.

Yo, buda y discípulos roguemos en una sola plegaria.

Para Mevlana Rumi, la oración es una forma de conexión profunda con lo divino, una experiencia que trasciende las formas rituales y se centra en el amor y la devoción. Rumi veía la oración como una danza del alma, una búsqueda de la verdad a través de la experiencia directa de lo sagrado más allá de las formulas religiosas. «No pidas a Dios, otra cosa que no sea Dios, fuera de Él, todo lo demás es perecedero. Nunca pidas a Dios algo sujeto a decadencia, No pidas a Dios nada fuera de El mismo, No obscurezcas tu mente con pensamientos y deseos que son quimeras». La oración es un camino para acercarse a la verdad y la esencia divina, una búsqueda del significado profundo de la existencia. A través de la oración, Rumi busca la unidad con lo divino, la disolución del ego y la fusión con la fuente de toda existencia, como una herramienta de transformación personal, un camino para purificar el alma y alcanzar la plenitud espiritual. Rumi, además de ser un gran poeta, fue un guía espiritual que fundó la orden Mevlevi como un camino para alcanzar la cercanía con Dios a través del amor, la música y la danza, especialmente la danza ritual conocida como Sema o whirling. Los derviches giradores, o mevlevis, son famosos por su danza en la que giran sobre sí mismos mientras realizan dhikr, la oración y recuerdo de Dios (2)

ORACIONES de los Derviches de la Orden Mevlevi

Cuando estoy contigo todo es oración.
Oré por un cambio,
Así que cambié de opinión.
Oré por orientación
y aprendí a confiar en mí mismo.
Oré por la felicidad
y me di cuenta que no soy mi ego.
Oré por la paz
y aprendió a aceptar a los demás incondicionalmente.
Oré por abundancia
y me di cuenta de que mi duda la mantenía fuera.
Oré por la riqueza
y me di cuenta que es mi salud.
Oré por un milagro.
y me di cuenta que yo soy el milagro.
Oré por un alma gemela
y me di cuenta que estoy con el Uno.
Oré por amor
y me di cuenta de que siempre está llamando,
pero tengo que permitirlo entrar.

(Mevlena Rumi)

Todas las religiones son una

¡En las oraciones y bendiciones de los puros de corazón están reunidas las alabanzas a todos los profetas, todas mezcladas juntas en una corriente, todos los vasos se vacían en una misma jarra. Puesto que el Ensalzado de hecho, es sólo Uno; todas las religiones son en sustancia una y la misma porque todas las alabanzas se dirigen hacia Su luz.
Sus numerosas formas y figuras se han tomado de esa Luz. Sólo dirigen sus oraciones al Ser considerado digno de ellas. Se equivocan por las opiniones erróneas acerca de Él. Como si alguien pretende adorar la luna y cuando mira en el fondo de un pozo la ve reflejada; si la adora mirando al pozo, se equivoca porque quiere adorar la luna, no su reflejo. Su error ocurre por las circunstancias. La luna que está en el cielo la supone en el pozo. El bien intencionado es infiel por ignorancia. Por estos falsos ídolos la humanidad está perpleja y conducida por vanas codicias a su dolor.

(Mevlena Rumi)

OPINIONES

La Oración de Ana Becoach

Para Musa Ibn Maymu (Maimonides) la oración era vista como una forma de conectar con Dios, no como una simple repetición de palabras, sino como un acto de concentración y reflexión que permite al individuo acercarse a la divinidad y comprender mejor la realidad. La intención y la pureza de la mente son esenciales para la oración, como él mismo señala en «Mishné Tora», donde explica que la intención significa liberar la mente de pensamientos extraños para que la oración sea efectiva.  Maimónides destaca la importancia de la concentración en la oración y la necesidad de purificar la mente de pensamientos mundanos para poder conectar con Dios. Considera que la oración es un diálogo con Dios, una forma de expresar gratitud, de pedir ayuda y de buscar guía. Para Maimónides, la oración no es solo un ritual, sino un acto de reflexión y de conexión espiritual que permite al individuo alcanzar un mayor conocimiento de sí mismo y del mundo que le rodea. la oración se basa en la importancia de la intención, la concentración y la pureza de la mente para lograr una conexión significativa con Dios.  Escribió una oración, también conocida como la Oración por el Médico, cuyo mensaje central es la importancia de la medicina como una vocación y la responsabilidad del médico de tratar a los enfermos (3)

Dios todopoderoso … , Tú me has elegido para velar sobre la vida y la salud. Apóyame para que haga el bien a los hombres. Inspírame un gran amor a mi arte y a mis criaturas.

No permitas que la sed de ganancias o que la ambición de renombre y admiración, enemigas de la verdad y del amor a la humanidad, puedan desviarme de atender al bienestar de tus criaturas.

Que esté siempre bien dispuesto para ayudar con buen ánimo al pobre y al rico, al malo y al bueno, al enemigo igual que al amigo.

Haz que en el que sufre no vea yo más que al hombre.

Que no deje de ver lo que es visible, pero no permitas que me arrogue el poder de inventar lo que no existe.

Concédeme que mis pacientes tengan confianza en mí y en mi arte y sigan mis prescripciones y mi consejo.

Aleja de su lado a los charlatanes y a la multitud de parientes oficiosos y sabelotodo  que echan a perder lo mejor de nuestro arte

Llena mi alma de delicadeza y serenidad, que no me haga un resentido ante los que saben más que yo, y haz que sea modesto.

Concédeme la fuerza, la alegría y la ambición de saber más cada día, pues el arte es inacabable y la mente siempre puede crecer.

Tú me has elegido para velar sobre la vida y la salud, apóyame para que haga el bien a los hombres.

(Maimónides)

«Quien aprende a orar bien, aprende a vivir bien. La oración es el encuentro de la sed de Dios y de la sed del hombre»

(San Agustín, teólogo)

LA ORACIÓN DE SIETE LÍNEAS

Para Swami Sivananda, la oración consiste en esperar que Dios decida lo que es mejor para ti cuando estás en un dilema.  El hombre aprende la oración a través de la desesperación (…) La oración es una invocación, una llamada a las fuerzas espirituales que fluyen a través del corazón, la mente y el alma humanas. La oración es una poderosa fuerza espiritual. Es tan real como la fuerza de la gravedad o la de atracción (…) La oración es la verdadera alma y esencia de la religión. Es la esencia misma de la vida del hombre. Ningún hombre puede vivir sin orar (…)    La oración no necesita de una inteligencia ni una elocuencia elevadas. Dios quiere tu corazón cuando rezas. Incluso unas cuantas palabras de un alma humilde y pura, aunque analfabeta, llamarán al Señor más que la corriente de palabras elocuentes de un orador o de un Pandit (…)No hay problema alguno  que no pueda resolverse  por medio de la oración, ningún sufrimiento al que no pueda  uno sobreponerse  a través de la oración, ninguna dificultad que no pueda  superarse, ningún mal que no se pueda vencer por la oración. Orar es comulgar con Dios. La oración es el milagro por el cual el poder de Dios fluye a través de las venas del hombre. Por tanto, arrodíllate y reza.

    Cuando en tu seno truenen las tormentas de la pasión y la ira, , de la vanidad y el vicio, arrodíllate y reza. Pues el Señor, y sólo Él, tiene poder sobre los elementos. En tu súplica yace tu fortaleza. Te llenarás con sus bendiciones, serás protegido por Su gracia, escudado por Su misericordia e incitado a seguir el sendero de la rectitud por Su voluntad divina (4)

SWAMI SIVANANDA- La Oración, todos pueden orar, los beneficios de la Oración.

» Si la única oración que uno dijera en toda su vida fuera ‘gracias’, sería suficiente.«

(Meíster Eckhart, teólogo)

Según Lama Rinchen Gyaltsen, de acuerdo a las tradiciones tibetanas, hay cinco oraciones extraordinarias: la oración de Samantabhadra, la oración de Mañyushri –el Buddha de la Sabiduría–, la oración de Maitreya –que va a ser el futuro Buddha, el amoroso–, la oración de Sukhavati –una oración que es muy poderosa por darnos acceso a una forma de evolucionar espiritualmente acelerada, darnos acceso alreino, al mandala del Buddha Amitabha– y luego la quinta es la oración de dedicatoria del Bodhicharyavatara –el texto tan famoso compuesto por Shantideva, el Camino delBodhisattva–.De todas las oraciones y plegarias por los maestros tibetanos, estas se consideran las cinco más importantes o poderosas en el contexto de resaltar lo que es la conducta iluminada de un bodhisattva (…) La estructura de la oración de Samantabhadra –como lo explican los maestros tibetanos–es muy simple: tiene una parte preliminar, una parte principal y una conclusión.La parte preliminar tiene el propósito principal de purificar todos los obstáculos, todas las trabas, todos los filtros, todas las sombras que nos limitan o bloquean el acceso a esos estados nobles; y el segundo aspecto es, desarrollar mérito, desarrollar virtud para que estemos más próximos a esos estados sublimes. La parte principal consta de la aspiración de Samantabhadra, es decir qué prácticas señala Samantabhadra que todo bodhisattva debe anhelar, debe querer superar, lograruna maestría, realizar; cuales son las cualidades y las prácticas que todo gran practicante debería integrar en su vida. Es un gran, gran, gran secreto que se va a revelar, y mucho delo que vamos a ver va a ser sorprendente, va a invitarnos a romper nuestros límites, nuestros horizontes conceptuales, nuestra noción de lo que es el tiempo, lo que es el espacio, lo que es el servicio, lo que es el compromiso, lo que es la verdad, lo que es la divinidad, lo que es la amistad espiritual, lo que es la meditación, lo que es el amor; lo va a expresar en su forma más perfecta, más sublime, más profunda.Y luego la conclusión consiste principalmente en dedicar, dedicar todos los méritos de esta recitación, de esta práctica, de esta meditación, para el bien, para el beneficio detodos los seres (5)

LAMA RINCHEN GYALTSEN- Samantabhadra, la reina de las oraciones.

«Dios, ofréceme la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, el valor para cambiar las que sí puedo cambiar, y la sabiduría para conocer la diferencia entre ellas«

(Reinhold Niebuhr, teólogo)

LA GRAN INVOCACIÓN (de Alice Bailey)
ORACIÓN DE SHANTIDEVA

Para Ramana Maharshi, la oración no es un ruego o negociación, no es una transacción con una deidad, sino una práctica de introspección y conocimiento del propio Ser. Es un medio para purificar la mente, eliminar la identificación con el ego y conectar con el Ser. También implica la «devoción» (bhakti), una entrega al Ser, una sensación de conexión con lo divino. La oración puede manifestarse en diversas formas, como la contemplación de la propia naturaleza, la meditación o el silencio interior, como una práctica que conduce a la autoconciencia y la comprensión de la realidad última. Implica la indagación en la naturaleza del «yo» y la conexión con el Ser. La oración verdadera implica enfocarse en la pregunta «Quién soy yo?». Al indagar en el origen del «yo» (la conciencia individual), se puede llegar a la comprensión de la verdadera naturaleza del Ser. Recomendaba el silencio como una forma de oración, señalaba que la frase «Yo soy» es el núcleo de la oración, ya que representa la realidad fundamental y la conexión con el Ser (6)

RAMANA MAHARSHI - Oración (Sat-Darshanam)

» Recordemos que el universo entero vibra al son de una auténtica plegaria: esta es una «acción sagrada» si la realizamos con todo nuestro ser, en tanto que abarca la plena realidad.  Ser capaces de invocar, es decir, de implorar a algo más grande que nosotros, infringiendo así nuestros límites, es el inicio de la sabiduría, la fuente de la esperanza y la condición de la dicha«

(Raimón Panikkar, teólogo)

Para Thich Nhat Hanh, en el Budismo se emplea la frase “recitar el sutra” como una Oración. Si comprendemos la palabra “rezar” en su significador más profundo, es decir, como una oración basada en nuestra práctica de la plena conciencia y la concentración, puede decirse que recitar sutras es como rezar (…) La practica y la oración es para que los dos aspectos de la vida, nuestro cuerpo y nuestra mente, estén sanos. ¿Por qué deseamos que el cuerpo esté sano y la mente libre de aflicciones?. No lo hacemos porque deseemos correr tras los deseos sensuales, sino para que día tras día podamos practicar felizmente el maravilloso Budadharma y liberarnos así con rapidez de las ataduras del nacimiento y de la muerte (…) Para rezar con eficacia tu cuerpo y tu mente han de permanecer en el momento presente; cuando eres plenamente consciente, tu mente está concentrada. Es el estado que te llevará a la prajña, una palabra sánscrita que significa entendimiento y sabiduría trascendente. Sin ella tus plegarias no son más que mera superstición (…) La energía de la oración y la meditación nos permiten volver a conectar con nuestro yo más elevado al mismo tiempo que satisfacemos nuestra necesidad básica de relacionarnos con el mundo. La necesidad de rezar es universal. No se conoce ninguna cultura en la que no existe la oración. La gente reza cuando esta feliz y triste, en las celebraciones y en las difunciones, con la paz y con la guerra, en las catedrales y en los coches. Los seres humanos, al parecer, llevamos la oración en la sangre (7)

THICH NHAT HANH- La forma más elevada de plegaria

» La mejor oración se produce cuando el orante en lo más intimo se transforma en aquello que venera«

(Angelus Silesius, teólogo)

HAZME UN INSTRUMENTO DE TU PAZ" (oración de Francisco de Asís)

Para Praramahansa Yogananda, la verdadera oración es una expresión genuina del alma, un impulso que brota de ella; es un hambre de Dios que surge de muy adentro y que le manifestamos ardiente, silenciosamente. Habla constantemente con Dios en tu interior, y El no podrá permanecer alejado de ti.  Si piensas siempre en El como el más próximo de cuantos nos son próximos, serás testigo de muchas maravillas en tu vida. (…) Cualquier oración pronunciada como si se pidiera limosna, por muy sincera que sea, limita el alma. Como hijos de Dios debemos creer firmemente que todo lo que nuestro Padre Celestial tiene, también lo poseemos nosotros: ése es nuestro derecho de nacimiento. Jesús logró la realización de esta verdad y lo manifestó al decir: «Mi Padre y yo somos uno»; por ello, al igual que el Padre Celestial, tuvo dominio sobre todas las cosas. (…) La mayoría de nosotros pedimos y oramos sin estar primeramente convencidos de nuestro derecho divino de nacimiento y debido a ello estamos limitados por la ley de la pobreza. No tenemos que mendigar, sino reclamar exigir a nuestro Padre lo que — imaginariamente— creemos haber perdido. Llegados a este punto, resulta indispensable destruir el errado pensamiento, afianzado durante siglos y siglos, de que tan sólo somos frágiles criaturas humanas (…) A Dios no se le puede «sobornar» con ofrendas, penitencias ni ceremonias, con el fin de cambiar caprichosamente su ley; tampoco responde a la oración ciega ni actúa parcialmente, Él sólo se conmueve cuando el ser humano colabora con la ley divina y por amor: el amor es la ley. Cuando el hombre cierra indefinidamente las ventanas de su vida al paso de los rayos divinos de la salud, del poder y de la sabiduría, es él mismo quien debe esforzarse por volver a abrirlas, para que pueda entrar de nuevo la luz curativa del Señor, que siempre está a nuestra disposición, esperando únicamente que le permitamos penetrar. No te desanimes si, incluso después de repetidos intentos, no te es posible ver a Dios, o escuchar- golpeando en la puerta de tu corazón. Durante mucho tiempo has estado huyendo de Él, escondiéndote en el cenagal de los sentidos. El alboroto de tus pasiones tumultuosas y de la carrera de pesados pasos en el mundo de la materia, te han impedido escuchar el divino llamado en tu interior. Detente. Serénate. Ora con constancia: del silencio surgirá la Divina Presencia. Ora de un modo inteligente, con el alma rebosante —no en voz alta, sino sólo mentalmente—, Sin exhibir ante nadie lo que sucede en tu interior. Ora con la mayor devoción, con la certeza de que Dios está escuchando cada una de las palabras que brotan de tu corazón. Cuanto más prolongada y profundamente medites y ores, más intensamente sentirás y más consciente estarás del gozo que se expande en tu corazón. Entonces sabrás, sin duda alguna, que Dios existe y que El es siempre-existente, siempre-consciente, omnipresente y siempre-nuevo gozo. Ese es el momento de orar al Señor: «Padre, ahora, hoy, todo el día, todos los días, en cada instante, durante el sueño, durante el estado de vigilia, en la vida y en la muerte, en este mundo y en el más allá, permanece conmigo como la respuesta (8)

PARAMAHANSA YOGANANDA- Cómo Orar para obtener la respuesta Divina.
PARAMAHANSA YOGANANDA- El Círculo Mundial de Oraciones

» Todos son aptos para la oración interior. Es una gran desgracia que la mayoría de la gente cree no estar llamada a ella. Pero lo estamos todos, igual que lo estamos a la redención«

(Madame Guyon, mística cristiana)

Según Gueshe Kelsang Gyatso, numerosas personas religiosas, tanto budistas como no budistas, conocen la eficacia de las oraciones por propia experiencia. Puesto que la naturaleza de la oración es intención o aspiración, es una acción mental. Las palabras de una oración nos ayudan a concentrarnos y nos inspiran fe, pero no son la oración propiamente dicha, puesto que también podemos rezar sin pronunciar palabras (…). En vidas pasadas, bajo la influencia de las perturbaciones mentales, acumulamos gran cantidad de karma negativo, rompimos nuestros compromisos e incurrimos en caídas morales raíz y secundarias. Como resultado, ahora nos resulta difícil generar fe y convicción en el Dharma y progresar en las etapas del camino hacia la iluminación. Además, si no purificamos este karma negativo ahora que tenemos la oportunidad de hacerlo, experimentaremos grandes sufrimientos en el futuro. Hemos acumulado malas acciones y experimentado sufrimiento como resultado desde tiempo sin principio, pero ahora tenemos la oportunidad de purificarlas por completo. Debemos utilizar esta preciosa oportunidad para purificar nuestro karma negativo, ¡no para acumular más! Puesto que la purificación es la raíz de la felicidad futura y las realizaciones espirituales, hemos de esforzarnos por limpiar nuestra mente de engaños y karma negativo (…) Con esta preciosa vida humana tenemos la gran oportunidad de lograr dos grandes objetivos: 1) alcanzar las realizaciones de las etapas del camino, desde la de confiar en nuestro Guía Espiritual hasta la de la visión superior, y 2) renacer en una tierra pura de Buda. Estos dos logros son la esencia de nuestra existencia humana. Ahora debemos aplicar la fuerza de la oración para conseguir estos dos objetivos. Si con fe y convicción dedicamos nuestras virtudes para alcanzar una meta determinada, sin lugar a dudas lo conseguiremos (9)

GUESHE KELSANG GYATSO- Oraciones para la practica diaria (Budismo moderno.V3)
GUESHE KALSANG GYATSO- Oración liberadora

» Vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes de que vosotros las pidáis«

(Mateo, 6:8)

Para Sri Aurobindo, la llamada del ser a las cosas más elevadas, al Divino, a todo lo que pertenece a la consciencia más alta o consciencia divina. Distinguir entre oración y aspiración: la aspiración es un don de sí sin esperar nada en respuesta; la oración comporta un elemento de demanda (…) Por supuesto, las personas que tienen una lógica muy severa te dirán: “¿Para qué rezar? Para qué aspirar, para qué pedir? El Supremo hace lo que quiere y hará lo que quiera”. Es obvio, no hay necesidad de decirlo, pero este impulso: “Señor, ¡manifiéstate!”, le da una vibración más intensa a Su Manifestación. De lo contrario, nunca habría hecho el mundo tal como es. Hay un poder especial, un gozo especial, una vibración especial en esta intensidad de aspiración del mundo por convertirse de nuevo en lo que Es. Y es por eso –un “por eso”, en parte fragmentario- que hay una evolución. A un Universo eternamente perfecto, eternamente manifestando la perfección eterna, le haría falta la alegría del progreso (10)

MADRE/AUROBINDO- Plegarias y Meditaciones.

» Tú, cuando reces, entra en tu habitación, cierra la puerta y reza a tu Padre, que está presente en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. Al rezar no charléis como los gentiles, que se imaginan que serán escuchados por su mucha palabrería. No hagáis como ellos, porque vuestro Padre conoce las necesidades que tenéis antes de que vosotros le pidáis«

(Mt 6,6-8)

OM MANI PADME HUNG

VIDA (poema de José Hierro)

Para Krishnamurti, como todos los problemas humanos profundos, la oración es un asunto completo que no puede ser tratado a la ligera requiere paciencia, investigación cuidadosa y tolerante, y uno no puede exigir conclusiones y decisiones definidas. Sin comprenderse a sí mismo, aquel que reza puede, por obra de su misma oración, verse conducido al autoengaño. A veces escuchamos decir a la gente, y algunas personas me lo han dicho, que cuando rezan por cosas mundanas dirigiéndose a lo que ellas llaman Dios, sus plegarias les son a menudo otorgadas. Si tienen fe, y según sea la intensidad de su plegaria, lo que busca salud, bienestar, posesiones mundanas -finalmente lo obtienen. Si uno se entrega a la oración suplicante, ésta trae su propia recompensa; la cosa que uno pide le es a menudo concedida, y esto da fuerza a súplicas futuras. Después, está la oración no por cosas o por personas, sino por experimentar la realidad, Dios, la cual también es frecuentemente respondida; y existen aún otras formas de oración suplicante, formas más sutiles y tortuosas, pero, con todo, son oraciones que suplican, imploran, ofrecen. Todas estas oraciones, estas plegarias, tienen su propia retribución, traen sus propias experiencias, pero ¿conducen a la realización de la realidad suprema? ¿No somos, acaso, el producto del pasado, y no estamos, por ende, relacionados con el enorme depósito de codicia y odio, así como de sus opuestos? Ciertamente, cuando hacemos una petición, u ofrecemos una plegaria suplicante, estamos dirigiendo un llamado a este depósito de codicia acumulada etcétera el cual trae realmente su propia retribución, y tiene su propio precio […]. La súplica a otro, a algo externo, ¿da origen a la comprensión de la verdad? (11)

KRISHNAMURTI-pensamientos sobre la Oración y la plegaria
KRISHNAMURTI- La Oración, la Concentración y la Meditación

» Dios ha instituido la oración para conferir a sus criaturas la dignidad de ser causas. «

(Pascal, matemático y filósofo)

Para Sri Ramakrishna, hay que asumir una actitud particular hacia Dios cuando uno Le reza, la actitud de amigo, servidor, hijo o ‘héroe’.” “Yo asumo la actitud de un niño. Para mí toda mujer es mi madre. La divina Maya, viendo esta actitud en un aspirante, se aparta de su sendero por mera vergüenza. La actitud de ‘héroe’ es extremadamente difícil. Los shaktas y los bauls entre los vaishnavas la siguen, pero es muy difícil conservar la vida espiritual pura en esta actitud. Uno puede también asumir otras actitudes hacia Dios, la actitud en la cual el devoto contempla a Dios serenamente como el Creador; la actitud de estar a Su servicio; la actitud de amistad, la actitud de amor maternal o la del amor conyugal. La relación conyugal, la actitud de una mujer hacia su marido o bienamado, contiene todo el resto: serenidad, servicio, amistad y cariño maternal. (…) ¿Se debe orar ante Dios en voz alta? Reza como te plazca. Es seguro que Dios te oye siempre. Él escucha hasta las pisadas de una hormiga (…) ¿Hay realmente alguna eficacia en la oración? Sí. Cuando la mente y el habla se juntan para pedir con fervor algo, esa plegaria recibe contestación. Pero no tienen eficacia los rezos de un hombre que dice de labios para afuera: Oh Señor, ¡todas estas cosas son Tuyas!, pero, al mismo tiempo, en su corazón, piensa que todo lo que tiene es suyo (…)Te sentirás inquieto por Dios cuando tu corazón se vuelva puro y tu mente quede libre de apego por las cosas del mundo. Sólo entonces tu oración llegará a Dios. Un hilo telegráfico no puede llevar mensajes si tiene alguna rotura o algún defecto. Yo solía clamar a Dios completamente solo, con un corazón anhelante. Solía llorar diciendo: ‘¡Oh Dios, ¿dónde estás Tú?’ Llorando así perdía por completo la consciencia del mundo. Mi mente se sumergía en el Mahavayu.” “¿Cómo puede uno alcanzar el yoga? Por el total renunciamiento al apego por las cosas mundanas. La mente tiene que estar pura y sin mancha, como el hilo del telégrafo que no tiene defectos.” (…) Para llegar a la presencia de un poderoso monarca, uno primero debe congraciarse con los porteros del palacio real y los oficiales que guardan el trono. Del mismo modo, para alcanzar al Señor Todopoderoso y obtener Su Gracia, uno debe practicar mucha devoción, servir a los devotos y vivir por largo tiempo en compañía de los sabios (…) Dios es extremadamente atento, hijo mío. Él ha oído cada uno de tus rezos. Tarde o temprano Él se te revelará, aunque sea en el momento de la muerte (12)

SRI RAMAKRISHNA- sobre la Oración y el rezo

» La plegaria es el esfuerzo para conectar el alma humana con el infinito «

(William James Dawson, teólogo)

ARUNALACHA AKSHARAMANAMALA poema de Ramana Maharshi

Para Swami Vivekananda, la Oración y Alabanza son los primeros medios de crecimiento. La repetición de los nombres de Dios tiene un poder maravilloso. Un mantra es una palabra especial, o un texto sagrado, o un nombre de Dios elegido por el gurú para que el discípulo lo repita y medite en él. El discípulo deberá concentrarse en una personalidad para orar y alabar, y esa es su Ishta (…) Ora para que esa manifestación que es nuestro Padre, nuestra Madre, corte nuestras ligaduras. Ora: “Tómanos de las manos como un padre toma a su hijo, y no nos abandones”. Ora: “¡No quiero riquezas o belleza, este u otro mundo, sino a Ti! ¡Señor! Tembloroso estoy. Tómame de la mano, Señor. Tomo refugio en Ti. Hazme tu servidor. Sé mi refugio”. Ora: “¡Tú eres nuestro Padre, nuestra Madre, nuestro Amigo más querido! Tú que soportas este mundo, ayúdanos a soportar la pequeña carga de nuestra vida. No nos abandones. No permitas que nos separemos de Ti. Deja que siempre descansemos en Ti” (13)

SWAMI VIVEKANANDA- Sobre la Oración y la Adoración Suprema

» Orar por otro es decir: «te amo» a escondidas, es amor sin ser visto, sin audiencias, ni aplausos; es fortalecer al otro y abrazarlo invisiblemente «

(C.S.Lewis, escritor)

Para Rajneesh Osho, orar es sentir, fluir con la naturaleza. Si quieres hablar, habla, pero recuerda que el hecho de hablar no va a afectar a la Existencia. Te afectará a ti y puede que esto sea bueno, pero la oración no va a cambiar la mente de Dios. Puede que te cambie a ti, pero si no te cambia, entonces es un truco. Puedes seguir rezando durante años, pero si no te cambia, abandónala, tírala; es basura, no acarrees con ella ya más. El orar no va a cambiar a Dios. Tú siempre piensas que si rezas, la mente de Dios cambiará, que El te será más favorable, que se inclinará más de tu lado. ¡No! El cielo inmenso, la Totalidad, solamente puede estar contigo si tú estás con ella. No hay otra forma de rezar. Yo también sugiero que reces, pero el orar debería ser un fenómeno energético, no un fenómeno de devoción a Dios; un fenómeno energético (…)La mayoría de las religiones se basan en técnicas orientadas al corazón: el cristianismo, el mahometismo, el hinduismo y muchas otras. Se basan en la persona orientada al corazón. Cuanto más antigua es una religión, más se basa en las personas orientadas al corazón. En realidad, cuando se escribieron los Vedas y se estaba gestando el hinduismo, había gente orientada al corazón. Y era realmente difícil encontrar una persona orientada a la mente entonces. Pero ahora lo contrario es un problema. No puedes orar, porque la oración es una técnica orientada al corazón. Es por eso que incluso en Occidente, donde el cristianismo -que es una religión de oración prevalece, la oración se ha vuelto difícil. Especialmente, la Iglesia católica se orienta a la oración. La meditación es más tendente a la mente, la oración es más tendente al corazón. O podemos decir que la oración es una técnica de meditación para las personas orientadas al corazón. Es por eso por lo que ayuda la oración. Es por eso por lo que Jesús podía decir: «El amor es Dios.» No es exactamente correcto, pero el amor es la puerta. Si estás profundamente enamorado; de quien sea, no importa de quien… El amor importa; el objeto del amor no importa. Si estás profundamente enamorado de alguien, tan enamorado que no hay relación desde la cabeza, si sólo el corazón está funcionando, entonces este amor se convertirá en oración y tu amada o tu amante se volverá divino. Si puedes estar enamorado sin que entre la dirección de la cabeza, tu amor está abocado a convertirse en oración y tu amado se convertirá en la puerta. Tu amor te centrará en el corazón (14)

OSHO- El Chakra de la Oración (5º)
OSHO: La Oración, tu armadura psicológica

» ¿Qué es la oración? Un intelecto libre de todo lo que es terrestre, y un corazón cuya mirada está totalmente volcada sobre el objeto de su esperanza «

(Isaac de Nínive, monje cristiano)

Según Yogi Bhajan, en la oración, la mente se focaliza y el ser humano habla al infinito. En la meditación, la mente se purifica, se vuelve receptiva y el infinito le habla al ser humano (…) Que cada buen deseo, cada oración, es el poder de extender la felicidad. Ese es el poder de la oración. No hay poder ni culto en este universo más grandioso que la oración;  no hay otro amor excepto el de la oración. Es la oración, es la devoción.  Quien sea que conozca el arte y el poder de la oración se convertirá en Dios (…)  Dios es nuestra ayuda. El único poder que tenemos es la oración, y el valor de la vida es solamente los momento felices que vivimos (…)

Cuando sea que obtengas tu balance interno en la oración, en ese momento Dios se sentará en tu corazón. Y es por eso que nosotros rezamos, y si rezamos largamente, tal vez. El vendrá dentro tuyo. Recuerda bien esto, te digo con todo mi amor y devoción que si no creas un lugar en tu corazón para que Él llegue y se siente, no irás hacia Él. (15)

YOGI BHAJAN- Oraciones por la Paz

» Nadie puede decir que es imposible para el hombre ocupado con los trabajos mundanos y que no pueda concurrir a la iglesia, el rezar en cualquier momento. Donde quiera que te encuentres puedes levantar un altar a Dios en tu mente por medio de la oración. Así, te será posible rezar en tu negocio, durante un viaje, de pie detrás del mostrador o sentado en tu taller…Ordenando tu vida de esta manera, todas tus acciones – por poder de la invocación del nombre de Dios – estarán signadas por el éxito y finalmente te prepararán para la ininterrumpida invocación piadosa del Nombre de Jesucristo. Llegarás a saber por experiencia, que la frecuente oración, este medio de salvación, es una posibilidad para la voluntad del hombre; que es en todo momento, en todas circunstancias y en todo lugar; que lo levanta fácilmente de la frecuente oración vocal a la oración mental y de ésta a la oración del corazón, la cual abre de par en par el Reino de Dios dentro nuestro’«

(Juan Crisóstomo, Teólogo)

Para Swami Abhishiktananda (Henri Le Saux), «vivir en oración constante, llevar una vida contemplativa, no es más que vivir en la Presencia real de Dios». Esta presencia real de Dios está ahí para todas las personas, tanto si son conscientes de ello como si no, «… pues en Él vivimos, nos movemos, y existimos» (Hch 17:28), como Pablo recordó a los atenienses. (…) «Oración es ver a Dios, reconocer y adorar su Presencia, su gloria en todas las cosas, en todos los seres, en todos los seres humanos y en cualquier otra criatura con la que el tiempo y el curso de los acontecimientos nos ponen en contacto. Todo aquel a quien la Providencia le lleva a cruzarse en mi camino, como compañero de viaje o un encuentro fugaz, para mí es un signo y una manifestación de Dios». Se puede considerar la oración, así entendida, como algo que no nos involucra con los demás; sin embargo es todo lo contrario: profundiza y purifica nuestras relaciones (…) No hay ningún método o técnica establecidos, todavía menos un atajo, que nos pueda llevar al Santuario interior, a la cumbre del Horeb (Monte Sinaí), que irresistiblemente arrastra a quien ha escuchado la llamada del Espíritu (1 R 19:8). Sin embargo, hay una practica cuya efectividad ha sido reconocida durante siglos en las tradiciones espirituales de India y el Cristianismo oriental. En India se denomina namajapa, la Oración del Nombre (16)

SAMI ABHISHIKTANANDA- La Oración (prólogo de James D.M. stuart)

SAMI ABHISHIKTANANDA- La Oración del nombre

» La Oración es el afecto del hombre que se une con Dios, un cierto diálogo tierno y familia, un estado de la mente iluminada para gozar del Dios todo el tiempo que le es permitido«

(Guillermo de Saint-Tierry, teólogo)

MELIKZARETH BLANCO MAZARELLY

https://melikzareth.blogspot.com/

PREGÓN PASCUAL (Exsultet) El Himno de la Luz que rompe las Tinieblas
GAYATRI MANTRA (por Sri Sathya Sai Baba)

Para Omraam Mikhaël Aïvanhov, hay una manifestación aún más elevada y evolucionada que la Meditación realizada por el alma y por el corazón. Es la Oración. Pensáis que en la oración hay un elemento/factor de voluntad y que el pensamiento participa en ello. Es cierto; pero los que predominan son el alma y el corazón. En la oración hay más sentimiento que reflexión y búsqueda intelectual. Mediante la oración, el alma humana pide, busca algo, aspira a algo, tiende hacia el Creador. Ésta establece una comunicación directa con Dios, mientras que con la meditación, el hombre piensa, reflexiona sobre Dios, pero no comunica con Él. La concentración está relacionada con la voluntad, la meditación con la Sabiduría, la oración con el Amor. Sin amor, no hay oración. Sin la sabiduría, no hay meditación. Sin voluntad, no hay concentración. Reuniendo a las tres, podremos realizar grandes cosas.

Existen diversas formas de concentración, de meditación y de oración. La forma más profunda de la oración es no pedir nada. ¿Para qué puede servir una oración así? No es tan necesario preguntárselo pues el mero hecho de que estemos en comunicación con Dios comporta que comamos, bebamos y respiremos en un mundo superior. La forma más elevada de la oración es la Contemplación, entendida en el sentido de una gran paz en la que uno se encuentra y desde la que se contempla la belleza, la perfección, la sabiduría de Dios (…) Cuando rezamos al Señor, nos unimos a Él, pero, ¿cuál es la naturaleza de este vínculo? Si, en el momento en que nos dirigimos a Él, no tratamos de elevar nuestro estado de conciencia ordinaria, si sólo le dirigimos reclamaciones personales, tal vez, en efecto, se arreglarán nuestros asuntos… pero no será necesariamente Él quien habrá intervenido para que se arreglen… ni tampoco para que se compliquen. Dios deja que los acontecimientos se desarrollen de acuerdo con las leyes que ha establecido. Y si para satisfacer sus ambiciones y sus codicias, los humanos desencadenan mecanismos en los que se cogen los dedos, un brazo o un pie, ellos son los únicos responsables de lo que les pasa, no es Dios quien los castiga. Y tampoco es Dios quien recompensa a los que se esfuerzan en caminar por el camino de la luz. Son ellos mismos los que, con su comportamiento, han atraído bendiciones. Entonces, ¿por qué debemos rezar? La oración es una fuerza que desencadenamos, y esta fuerza alcanza algunos centros de nuestro cerebro. Es entonces cuando recibimos no sólo una luz que nos ilumina sobre los acontecimientos que estamos viviendo, sino también una inspiración para actuar bien (17)

OMRAAM MIKHAËL AÏVANHOV- Sobre el tema de la Oración

» El fruto del silencio es la oración. El fruto de la oración es la fe. El fruto de la fe es el amor. El fruto del amor es el servicio. El fruto del servicio es la paz «

(Teresa de Calcuta, monja cristiana))

Para Barry Long, nosotros, los seres humanos, hemos rezado desde el comienzo de los tiempos. Pero, sea lo que fuese lo que hemos rezado, no parece que se hayan conseguido muchas cosas buenas. ¿Se debe a nuestras oraciones que el mundo sea tan bueno o tan malo como es?. ¿Podríamos afirmar que existe realmente algún tipo de oración más recomendable?. La oración es la fuerza más efectiva del mundo; sin embargo, es también a la vez la peor usada e incomprendida. El hecho de que te consideres ateo, agnóstico o materialista no es relevante ahora. Estas definiciones constituyen una forma de conceptualización personal y no tienen, por tanto, un significado real. Eres un ser humano. Esto significa que tienes la facultad de rezar. Todo el mundo reza. En este momento estas rezando, aunque no te des cuenta. Y es precisamente esta inadvertencia o ignorancia la que ha llevado a la Humanidad al borde de la aniquilación. Rezas –esto es, emanas una fuerza invisible y potencialmente peligrosa- cuando te esfuerzas por alcanzar una meta, cuando estás excitado o deprimido o cuando te sientes amenazado o infeliz. Y rezas en todo momento por deseo y por esperanza. Rezas cuando quieres algo, para que se cumplan expectativas. Rezas cuando eres codicioso, o eres lujurioso o… Y cuando estas impaciente, furioso o embargado por el deseo. Existir y sobrevivir en este mundo como persona es algo que requiere una oración constante (de forma racional consciente o desde la inconsciencia o ignorancia). Y cuando rezas, rayos u ondas de fuerza vital en forma de proyecciones continuas irradian de ti hacia el mundo. Cuando más concentrado y sensible estés en un determinado momento, más fuertes y contundentes serán las ondas personales de tu oración. Hay ocasiones en que incluso alcanzan el punto de la violencia. Todo esto no sería perjudicial si las ondas de oración que salen de nosotros fuesen, como al parecer todos nos imaginamos, inofensivas. Pero no son inofensivas ni mucho menos; son energéticamente vitales y acumulativas. Se han estado formando desde el origen de los tiempos, y hoy en día, por su interacción global, componen la fuerza invisible más destructiva y diabólica del mundo (18)

BARRY LONG. Una Oración por la Vida

» Cuando oren, no sean como los hipócritas, porque a ellos les encanta orar de pie en las sinagogas y en las esquinas de las plazas para que la gente los vea. Les aseguro que ya han obtenido toda su recompensa. Pero tú, cuando te pongas a orar, entra en tu cuarto, cierra la puerta y ora a tu Padre, que está en lo secreto. Así tu Padre, que ve lo que se hace en secreto, te recompensará. Y al orar, no hablen solo por hablar como hacen los gentiles, porque ellos se imaginan que serán escuchados por sus muchas palabras. No sean como ellos, porque su Padre sabe lo que ustedes necesitan antes de que se lo pidan «

(Mateo 6: 5-8)

Para Abdu’l–Bahà, la sabiduría de la oración es esta: que produce una conexión entre el siervo y el Verdadero, porque en ese estado (es decir, el estado de oración) el hombre vuelve su rostro con todo su corazón y su alma hacia su Alteza el Todopoderoso, buscando asociarse con Él y deseando Su amor y Su compasión. La mayor felicidad para un amante es conversar con su amado, y el mayor regalo para un buscador es familiarizarse con el objeto de su anhelo; por eso cada alma que se siente atraída hacia el Reino de Dios tiene su mayor esperanza en encontrar una oportunidad de rogar y suplicar ante su Amado, apelar a Su Misericordia y Su Gracia y sumergirse en el océano de Su Palabra, Su Bondad y Su Generosidad. Además de todo esto, la oración y el ayuno son la causa del despertar y de la atención y conducente a la protección y la preservación de las pruebas (…) Rezar no es leer los Salmos. Rezar es confiar en Dios y serle sumiso en todas las cosas. Sé sumisa, y las cosas cambiarán para ti. Pon tu familia en las manos de Dios. Ama la Voluntad de Dios. Los barcos fuertes no son conquistados por el mar; remontan las olas. Sé ahora un barco fuerte, no uno roto” (…) Me has preguntado ¿por qué orar? ¿Cuál es la sabiduría de ello? Pues Dios lo ha establecido todo y ejecuta todos los asuntos en el mejor orden, y ordena todo de acuerdo a una medida favorecedora, y pone las cosas en su sitio con la mayor propiedad y perfección; por lo tanto, ¿cuál es la sabiduría de rogar y suplicar y declarar las necesidades de uno y buscar ayuda?’ ‘Sabes, en verdad, que es propio del débil suplicar al Fuerte y corresponde al buscador de la bondad suplicar al Glorioso, al Bondadoso. Cuando uno suplica a su Señor, se vuelve hacia Él y busca la bondad de Su Océano; esta súplica es en sí misma una luz para el corazón, una iluminación para su visita, una vida para su espíritu y una exaltación para su ser. Por consiguiente, cuando rezas a Dios y Le dices: Tu Nombre es mi curación’, considera ¡cómo se alegre tu corazón, cómo se deleita tu alma con el espíritu del amor de Dios y cómo se siente atraída tu mente hacia el Reino de Dios! Por miedo de esta atracción crece nuestra habilidad y capacidad. Cuando el receptáculo se amplia, el agua aumenta, y cuando crece la sed, el regalo de las nubes se hace agradable al paladar del hombre. Este es el misterio de la súplica y la sabiduría de pedir lo que uno desea (…) todo esfuerzo y dedicación realizados por el hombre con todo su corazón es devoción, si están inspirados en motivos elevados y en el deseo de servir a la humanidad. Esto es la devoción: servir a la humanidad y satisfacer las necesidades de la gente. El servicio es oración (19)

ABDU'L-BAHÀ- Oraciones reveladas

» Cuando ya no rece para satisfacer mis deseos materiales, sino para obtener a Dios mismo, entonces Dios se me aparece de una forma u otra (humana o no humana) para guiarme hacia Él mismo, en respuesta a mi oración y de acuerdo a mis necesidades «

(Ramana Maharshi, maestro espiritual)

Para Ibn Al Arabi (Abenarabi de Murcia) para lograr la perfección, debe el alma desprenderse de toda afición mundana y aspirar a la familiaridad y unión con solo Dios por la oración mental (…) Cinco son las especies de oración que Abenarabi describe o a las que fugazmente alude en sus opúsculos: la oración litúrgica obligatoria para todo fiel (sala); la lectura del Alcorán meditada, de mera devoción (talawa); la meditación propiamente dicha (tafácor); el canto religioso (samáa); y la contemplación adquirida mediante el ejercicio de «la soledad» (¡alwa), que consiste en la repetida recitación de jaculatorias para evocar y conservar el recuerdo de Dios (dzicr) (…) Ahora bien, Abenarabi no presta grande atención a esta primera y elemental forma de orar, a la oración ritual  y su carácter obligatorio de recitar las cinco horas canónicas, dentro de la mezquita o fuera de ella, si sus obligaciones seglares no les permiten asistir al templo, porque su propósito principal va enderezado a la formación espiritual de los devotos; pero no deja de sugerirles el método eficaz para elevar este ejercicio litúrgico al nivel de una contemplación incipiente, transformando los rezos vocales y los actos corpóreos que lo integran en una verdadera oración afectiva, mediante la atención y devoción; las potencias del alma, interiormente recogidas y orientadas hacia Dios, van aplicando a cada uno de los ritos prescritos el sentido místico que en ellos late y provocando emociones religiosas coherentes con aquel sentido, las cuales a su vez determinan a la voluntad a realizar los actos propios de las respectivas virtudes. Esta moción de afectos ofrece, pues, un interés singular para la historia de la psicología religiosa. Sin que pueda decirse que sea una oración metódica afectiva, del tipo de la beruliana, se empareja con ésta por su prurito de sobreponer el sentimiento al pensamiento (…)

la oración preferible es: «No hay más Señor que Dios», pues en ella se contiene la negación de todo lo que no es Dios y la afirmación de la presencia de Dios. Cuando quiera, pues, orar, haga la ablución ritual, arrepiéntase de todos sus pecados, purifique sus vestidos y siéntese con las piernas cruzadas, dentro de la celda; y orientado hacia la alquibla, poniendo ambas manos sobre las rodillas y con los ojos cerrados, comience el rezo de la jaculatoria, con profundo respeto de la Majestad divina, de modo que pronuncie la parte primera «No hay más Señor» como si la sacase de debajo del ombligo y profiera después la otra parte «sino Dios» encima del corazón, a fin de que su influencia llegue a todos sus miembros y en ellos quede grabada. Si alguna idea extraña le sobreviene a la mente, rechácela con la negación del «No hay más Señor» y sustituyala con la afirmación «sino Dios», en prueba de amor hacia El, a fin de que el corazón quede vacío de las imágenes de la fantasía y se ocupe sólo en la contemplación (20)

IBN AL ARABI- La Oración de Soledad

» Esfuérzate para que Dios sea grande en ti, ten el celo de Dios en todas tus idas y venidas. Aférrate a Dios y Él efectuará todo lo bueno. Lo que antes buscaste, ahora te busca. Lo que antes perseguiste, ahora te persigue. Lo que antes dejaste, ahora te deja. Quien realmente se aproxima a Dios, trae consigo todo cuanto es divino y hace que huya de él todo cuanto le es ajeno. Dios, ayúdame a encontrar un corazón puro con el cual te ame a ti y a toda la creación. Que en tu servicio me olvide de mí mismo.«

(oración del Maestro Eckhart, teológo y místico)

NOTAS Y REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:

(1) Extractos del libro “La Oración, su naturaleza y su técnica” de Kirpal Singh  (editorial Ruhani Satsang, Sawan Ashram, Delhi 1965)

(2) Extractos de la IA por medio de Google como respuesta Rumi y la Oración

(3) Textos extraídos de la IA Google. Y de la Universidad Nacional Experimental Francisco de Miranda (studocu.com)

(4) Extractos del capítulo 47 del libro “La Senda Divina” de Swami Sivananda (Ediciones Librería Argentina –ELA-, Buenos Aires 2006)

(5) Extracto de la transcripción del curso online “Samantabhadra – La Reina de las Oraciones” impartido por Lama Rinchen Gyaltse (Paramita Editorial, Alicante 2021)

(6) textos extraídos de Google IA como respuesta a “Ramana Maharshi y la Oración”.

(7) textos extraídos del libro “El poder de la plegaria” de Thich Nhat hanh (Editorial Planeta/Zenith, Barcelona 2019)

(8) Texto extraído de “El santuario del Alma” de Paramahansa Yogananda (Self-Realization Fellowship, marzo 2020)

(9) Extractos del libro “Una vida con significado, una muerte gozosa” de Gueshe Kelsang Gyatso (Editorial Tharpa, Madrid 2004)

(10) Extractos del libro “El Ser psíquico, naturaleza misión y evolución del Alma” de Sri Aurobindo (Ed. Fundación Centro Sri Aurobindo  2002)

(11) Textos extraídos del libro “El Libro de la Vida” de J.Krishnamurti (Editorial Edaf, Madrid 1996)

(12) Extractos del libro “El Evangelio de Sri Ramakrishna” de Swami Adbedhananda (Sarada Ma Publishing, Trabuco Cayon /California 2

(13) Extractos del fragmento sobre la oración del libro “Vedanta: voz de la libertad” de Swami Vivekananda (Ed. Sarada Ma Publishing , Trabuco Canyon/CA  2010)

(14) Extractos del libro “El libro de los secretos. Vol 1”, de Rajneesh Osho (Gaia ediciones, Madrid 2007)

(15) Textos extraídos del libro “El poder de la palabra hablada, enseñanzas de Yogi Bhajan” (Editorial Asociación Española de Kundalini Yoga –AEKY-, Madrid  2018)

(16) Extractos del libro “Oración, una mirada a la oración contemplativa en la espiritualidad oriental y occidental” de Swami Abhishiktananda (editorial asociación Pequeñatierra, Huesca 2020)

(17) Extracto de la conferencia del Maestro de fecha 1º de Mayo de 1941. Y pensamiento del miércoles 10 de abril de 2013-www.prosveta.com/thought-of-the-day.phtml

(18) Extracto del capítulo -lo insospechado- del libro “Una Oración por la Vida” de Barry Long (Editorial Gulaab, Madrid 2003)

(19) Extractos del libro “Relatos de la vda de Abdu´l –Bahà” de Annamarie Honnold (Editorial Bahà´í de España, Terrasa 1986)

(20) Extractos del libro “El Islam cristianizado, estudios del Sufismo a través de la obra de Abenarabi de Murcia” de Miguel Asín Palacios (Editorial Plutarco, Madrid 1931)